Hablar sobre el origen del tatuaje es algo bastante complejo ya que se trata de una práctica ancestral que se ha difundido de forma independiente entre numerosos pueblos de la antigüedad. El tatuaje ha sido patrimonio de muchas civilizaciones, por eso no podemos localizar con exactitud el nacimiento de este arte ornamental, relacionado en muchas ocasiones con la expresividad del espíritu. En cada cultura se utilizan técnicas distintas, aunque en todas se aprecian rasgos comunes.
La técnica:
En la Polinesia se solía utilizar un pequeño martillo provisto de muchas puntas, que golpeando con un bastón perforaba la piel introduciendo así el pigmento. En Nueva Guinea se afilaban los dientes del tiburón para "cincelar" la piel. En Japón y también en algunos paises norteafricanos , las puntas se fijaban en una vara de madera que se empujaba a mano bajo la piel.
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| Guerrero Mahorí |
Los diferentes tipos de decoración característicos de cada pueblo no son casuales. En Egipto, Perú y en las poblaciones islámicas se utilizaban sobre todo puntos y líneas; estilizaciones geométricas en forma de cuadrados y triángulos en la Polinesia; espirales faciales cinceladas en los mahorís; cuadrados muy coloreados por todo el cuerpo entre los japoneses; decoraciones de grandes manchas negras en Borneo; escarificaciones en relieve entre las poblaciones de piel oscura.
Los primeros ejemplos de la antiguedad:
El primer ejemplo conocido de tatuaje lo testimonia el descubrimiento de la momia de Similaun (3300 a.d.C.), sobre el que se observaron pequeños signos muy estilizados y esquemáticos. Los primeros tatuajes eran de tipo terapéutico, para la curación de dolores artículares. Ya en Egipto (2200 a.d.C.), los tatuajes tenian un carácter sagrado o religioso.
Dando un salto en el tiempo, podemos decir que en la época de las persecuciones a los cristianos por parte de los romanos,los fieles se tatuaban símbolos religiosos como muestra de reconocimiento dentro de la propia comunidad. En Europa la práctica del tatuaje desaparece hasta el siglo XVIII, período en el que el viejo continente se abre al descubrimiento y la exploración de tierras lejanas, enfrentandose a nuevas culturas y civilizaciones. La llegada de muchos principes tahitianos supuso una auténtica conmoción, ya que estos personajes estaban profúsamente tatuados. Muchos marineros de la época se empezaron a tatuar al estilo tribal tahitiano. A mediados del siglo XIX, marineros y soldados eran los principales portadores del arte del tatuaje, pero el gran auge se produjo a finales de siglo.
EL TATUAJE EN ESPAÑA:
El desarrollo de esta práctica en España ha sido más lento que en el resto de Europa, excluyendo Italia, Portugal y Grecia, debido a los prejuicios y a la deconfianza, que en las últimas décadas del siglo XIX desacreditaron el arte del tatuaje, mostrandolo como una "práctica oscura".
Tendremos que esperar hasta los años sesenta para empezar a hablar del tatuaje moderno en España. Esta actividad empezó en las zonas portuarias, donde no solo se tatuaban los marineros sino también personas adineradas ligadas de alguna forma a la tradición marinera. A principios de los ochenta, el fenómeno se difundió de forma considerable entre las clases medias/altas, con el nacimiento de una cultura alternativa qu econsideraba el tatuaje como una forma de extravagancia y transgresión.
En los años ochenta, bajo el impulso de la cultura punk, heavy, rocker y de otras nuevas tendencias los jóvenes empezaron a interesarse por el tatuaje, y algunos ya lucían trabajos realizados en el extranjero.
En la actualidad, vivimos una auténtica moda del tatuaje, y gentes de diferentes estratos sociales ,culturales y económicos lucen bonitos diseños, aunque decir que el tatuaje está plenamente aceptado en nuestra sociedad no es del todo acertado.
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